miércoles, 1 de junio de 2016

RAMBLA DE CANALETES 5



RAMBLA DE CANALETES  5



Si se aproxima más estoy perdido.

Siento inminente, cerca, está llegando,
avanzando su garra horripilante,
rozándome, el amor. Un amor nuevo.

Y no otra vez, maldita, inagotable,
embustera emoción que me promete
deleites que transforma en dolor luego.
Otra vez no. No vuelves a engañarme.

Tengo que rechazar a la que muestras
seductora, ofreciéndome delicias
seguras, tan cercana ahora, rozándome.


Y si no huyo enseguida estoy perdido.




CARRER DE SANT VICENÇ



CARRER DE SANT VICENÇ


No puedo estar tan solo. Hasta una llave
pertenece a la puerta que esclaviza.
Los campos son dominio del arado.
Los peces son cosecha de las redes.

Todo posee un dueño al que rendirse.
Alguien en quien sentirse utilizado.
Alguien que dé sentido a aquellas horas
que aparecen al fin de la jornada.

Debe pertenecer un hombre a alguien.
A Dios, a una mujer… Esclavizarse
para sentir que un fin tiene sus pasos.
Que a uno alguien le espera en algún sitio.




PLAÇA DEL PORTAL DE LA PAU 2



PLAÇA DEL PORTAL DE LA PAU  2

Resulta reducido mi aposento,
mi casa, calle, barrio, mi ciudad…

Si la dejara sé que me hallaría.

Me resulta pequeña mi provincia,
mi nación, continente, el universo…

Regresaría a mí de abandonarla.

necesito un espacio más extenso
para poder librarme de mi mente.

Y escapar sin que vuelva ella a encontrarme.





CARRER AMPLE 3



CARRER AMPLE  3

Yo no quisiera estar aquí. Me agobia
esta casa, esta gente, esta ciudad.

Aquí no. No quisiera estar aquí.
He de buscar el modo de escaparme.

Tal vez encontraría otro sitio,
en otra casa, en otra gente, en otra
ciudad, el mismo o peor desasosiego.

Mas no quisiera estar aquí. Este cuarto
inhóspito, estos seres inquietantes,
esta urbe aterradora, fría, insólita.

Aquí yo no estoy bien. No en esta casa,
con esta gente, en esta ciudad. No,

yo no quisiera estar aquí atrapado.

He de huir aunque muera en el intento.



CARRER DE TRAFALGAR 3



CARRER DE TRAFALGAR  3


Duele, es cierto, estar solo. Sin las cosas
que uno esperó obtener para su vida.
Ni siquiera el amor he conseguido.

Y el amor es lo fácil, lo primario.
Lo que todos poseen. yo estoy solo.
Ni siquiera el amor he conseguido.

Tiene que haber amor, está en los libros,
en el cine, está en mí. yo lo he sentido
cercano, casi al tacto de la mano.

Y no pude aprehender ese amor mutuo.
Como si hubiera un vidrio que impidiera
coger lo que uno tiene ya por suyo.

Las aceras que enmarcan la calzada
se evaden quietamente hacia lo lejos.
Tal vez lleguen a unirse en la distancia.





PASSEIG DE GRÀCIA 5



PASSEIG DE GRÀCIA  5

No reconozco a aquel que era yo mismo.
El que encontraba al mundo fácil presa
de su ambición enorme y su talento.
Porque ya no me importa haber quedado
tan lejos de la meta que trazara.

No quiero proseguir hacia delante.
Estoy cansado. –«¿Para qué –me digo-
querer ser el primero? Moriré
como aquellos que fueron también unos
y no gustan del bien que merecieran».

¿Es esto ser vencido? ¿Es darme cuenta
que sobrevaloré mi escaso mérito?
Es igual lo que sea. Estoy cansado
de hallar a cada paso un nuevo obstáculo.
No hay nada que merezca tanto esfuerzo.




PASSEIG DE GRÀCIA 2



PASSEIG DE GRÀCIA  2

Río con menosprecio de la gloria.

Porque la gloria ¿qué es? Sólo un recuerdo.
Amarrar a la tierra uno su nombre
para que quede alzado firmemente
cuando el viento del tiempo va pasando.

Si la gloria es recuerdo ¿vale, acaso,
un nombre sin un cuerpo en el futuro?
Si uno vive en su vida únicamente
y uno muere a su vida cuando muere,

la gloria ¿para qué? También la tierra,
como otro cuerpo más, morirá un día.
Y tienen que pudrirse en su cadáver
los nombres. Todo olvido para siempre.


Río con menosprecio de mí mismo.





PASSEIG DE GRÀCIA 3


PASSEIG DE GRÀCIA  3



Tienes que decidirte. Yo no puedo
ir dejando pasar todos los coches.

El tiempo cuenta aprisa la existencia.
No se detiene, duda y retrocede.

Es ahora la ocasión. Si tardas mucho,
acaso cuando llegue el beso tuyo
mi boca esté ocupada en otros labios.

Entonces no valdrá que me supliques.
El deseo de ti se habrá marchado
y el deseo no vuelve una vez ido.

Ahora que te rodea mi deseo,
como un fruto que envuelve su semilla,

tienes que decidirte. En este instante.
El tiempo cuenta aprisa la existencia.






CARRER DE VILA i VILÀ 2



CARRER DE VILA i VILÀ  2


Dices que no te gusta, que no quieres
y tu vestido es siempre como un muro
con grietas que impacientan a mis manos.

Te cuelgas, sin embargo, de mi brazo
y te aprietas sonriendo. Yo no puedo
evitar que mi cuerpo busque el tuyo.

Y estoy cual esos postes de alumbrado
que ven algo extraviado por la acera,
mas no pueden bajar a recogerlo.

¿Por qué quieren a un hombre las mujeres?
Sólo se puede amar de una manera.
Tu madre nada sabe de estas cosas.

Te he comprado zapatos y unas medias.
Te compro lo que quieres. Lo hago a gusto.
Tú sabes conseguirlo si me miras.

Debes corresponderme de algún modo.
No sirven por más tiempo las palabras.

Solo se puede amar de una manera.






PLAÇA DE VASCO DE GARAY 2



PLAÇA DE VASCO DE GARAY  2
Mi casa necesita una mujer
que llene de canciones sus paredes
y complete mi cama por la noche.

Un cuerpo que discurra en torno mío.
Una voz que responda si digo algo.

Yo no tengo el dinero de los otros;
no sé tampoco hablar como los otros,
ni tengo la apostura de los otros.

Por eso necesito una mujer
que oculte mi tristeza entre sus brazos.





PLAÇA DE CATALUNYA 2



PLAÇA DE CATALUNYA  2
Amar es restregarse contra un cuerpo
sorbiendo secreciones y microbios.
Sentido cual babosa por un rato.

Comer es engullir descuartizados
cadáveres, a trozos, triturándolos
entre salivas y huesos. Y tragándolos.

Dormir es no existir conscientemente.
Tal vez lo único bueno si no fuera
que algún sueño lo importuna.

Amar, comer, dormir. Unas palabras
que suenan como fiesta a los sentidos
y encubren suciedad, crueldad y angustia.

Y es esto lo mejor. E imprescindible.
Es innoble vivir. Pero en mi mano
está no ser un cómplice más tiempo.







PLAÇA DE MOSSEN JACINT VERDAGUER



PLAÇA DE MOSSEN JACINT VERDAGUER  
Somos los más. Los fuertes por el número.

Y hacemos el vacío en torno tuyo
aislándote en un muro de silencio.
O de burlas hirientes si tus gritos
se asoman a las tapias que te encierran.

Trituraremos tu obra mientras vivas.
Dejaremos, no obstante, para ti,
el mañana, el futuro. Es nuestro obsequio.
Sueña en él tus noches marginadas.

Mas no olvides que el hoy nos pertenece.

Y nos lo repartimos. Este trozo
de honores y dinero para aquél.
Para éste y para mí nuevas prebendas...
Ocupamos los puestos importantes.

Nunca permitiremos que se premie
tu originalidad. Ser diferente
a nosotros resulta intolerable,
pues somos los normales: los mediocres.

Somos los más. Los fuertes por el número.







CARRER DE TRAFALGAR 2



CARRER DE TRAFALGAR  2
-«¿Y la gloria?» –pregunto en alta voz.
Me pregunto a mí mismo mientras ando.
Río sin alegría. Hasta los árboles
parece que se ríen en la noche.

Las casas más lejanas de la calle
se asoman y escudriñan con cautela.
Deben verme cual nube rezagada
perdida por el cielo, con su angustia.

Me río nuevamente de la gloria;
de esa abstracción que habita ahí en la mente.
Alucinante. Siempre inaprensible.
Odiada, más deseada ansiosamente.

Sólo será un sonido para mi oído
y, al pronunciarla, un gesto de la boca.
Para mí y tantos otros. Lo sabemos.
Nos duele más por ello en la garganta.




PLAÇA REIAL 2



PLAÇA REIAL  2
Tu cuerpo que deseo y que rechazo
mi voluntad domina. Como el vino
mi mente turba, excita y reconforta.
Después, saciado, siento oscuramente
vergüenza del placer así logrado.

Mas al cabo de un tiempo, tu apetencia
resurge en mí acuciante y desespero
y te busco si no te hallo cercana.
No eres joven ni hermosa, sin embargo.


Pero he de conseguirte nuevamente.
A ti, aunque se me ofrezcan las más bellas.
Y no me importa entonces el orgullo,
vileza, sumisión o servilismo.

Embriagarme en tu cuerpo es lo que importa.
Mi voluntad domina. Como el vino
que la garganta exige, imprescindible,
necesito obtener, poseer tu cuerpo:
esta dosis que viaja hacia mí mismo
.







PLA DE PALAU 3



PLA DE PALAU  3
Tú mi protagonista, mi heroína.

Me impacta tu caricia en mis sentidos
y me siento feliz contigo, a solas.
Toda tú, mía. Yo en ti realizándome.

Mas me dejas y sufro con tu ausencia.

Y desespero. Y vivo mil infiernos
hasta hallarte otra vez, en una esquina
o en el sórdido ambiente de algún antro.

No importa dónde estés. Sólo tú importas.

Quisiera liberarme, no sentir
esta cruel dependencia que a ti me ata
como el sol a la luz que huye y no escapa.

Mas no puedo vivir sin ti, heroína.







PLA DE PALAU 3



PLA DE PALAU  3
Tú mi protagonista, mi heroína.

Me impacta tu caricia en mis sentidos
y me siento feliz contigo, a solas.
Toda tú, mía. Yo en ti realizándome.

Mas me dejas y sufro con tu ausencia.

Y desespero. Y vivo mil infiernos
hasta hallarte otra vez, en una esquina
o en el sórdido ambiente de algún antro.

No importa dónde estés. Sólo tú importas.

Quisiera liberarme, no sentir
esta cruel dependencia que a ti me ata
como el sol a la luz que huye y no escapa.

Mas no puedo vivir sin ti, heroína.







PLAÇA REIAL 2



PLAÇA REIAL  2
Tu cuerpo que deseo y que rechazo
mi voluntad domina. Como el vino
mi mente turba, excita y reconforta.
Después, saciado, siento oscuramente
vergüenza del placer así logrado.

Mas al cabo de un tiempo, tu apetencia
resurge en mí acuciante y desespero
y te busco si no te hallo cercana.
No eres joven ni hermosa, sin embargo.


Pero he de conseguirte nuevamente.
A ti, aunque se me ofrezcan las más bellas.
Y no me importa entonces el orgullo,
vileza, sumisión o servilismo.

Embriagarme en tu cuerpo es lo que importa.
Mi voluntad domina. Como el vino
que la garganta exige, imprescindible,
necesito obtener, poseer tu cuerpo:
esta dosis que viaja hacia mí mismo
.







CARRER DE TRAFALGAR 2



CARRER DE TRAFALGAR  2
-«¿Y la gloria?» –pregunto en alta voz.
Me pregunto a mí mismo mientras ando.
Río sin alegría. Hasta los árboles
parece que se ríen en la noche.

Las casas más lejanas de la calle
se asoman y escudriñan con cautela.
Deben verme cual nube rezagada
perdida por el cielo, con su angustia.

Me río nuevamente de la gloria;
de esa abstracción que habita ahí en la mente.
Alucinante. Siempre inaprensible.
Odiada, más deseada ansiosamente.

Sólo será un sonido para mi oído
y, al pronunciarla, un gesto de la boca.
Para mí y tantos otros. Lo sabemos.
Nos duele más por ello en la garganta.




PLAÇA DE MOSSEN JACINT VERDAGUER



PLAÇA DE MOSSEN JACINT VERDAGUER  
Somos los más. Los fuertes por el número.

Y hacemos el vacío en torno tuyo
aislándote en un muro de silencio.
O de burlas hirientes si tus gritos
se asoman a las tapias que te encierran.

Trituraremos tu obra mientras vivas.
Dejaremos, no obstante, para ti,
el mañana, el futuro. Es nuestro obsequio.
Sueña en él tus noches marginadas.

Mas no olvides que el hoy nos pertenece.

Y nos lo repartimos. Este trozo
de honores y dinero para aquél.
Para éste y para mí nuevas prebendas...
Ocupamos los puestos importantes.

Nunca permitiremos que se premie
tu originalidad. Ser diferente
a nosotros resulta intolerable,
pues somos los normales: los mediocres.

Somos los más. Los fuertes por el número.






PLAÇA DE CATALUNYA 2



PLAÇA DE CATALUNYA  2
Amar es restregarse contra un cuerpo
sorbiendo secreciones y microbios.
Sentido cual babosa por un rato.

Comer es engullir descuartizados
cadáveres, a trozos, triturándolos
entre salivas y huesos. Y tragándolos.

Dormir es no existir conscientemente.
Tal vez lo único bueno si no fuera
que algún sueño lo importuna.

Amar, comer, dormir. Unas palabras
que suenan como fiesta a los sentidos
y encubren suciedad, crueldad y angustia.

Y es esto lo mejor. E imprescindible.
Es innoble vivir. Pero en mi mano
está no ser un cómplice más tiempo.







CARRER DEL CONSELL DE CENT



CARRER DEL CONSELL DE CENT
No se puede salir cuando se ha entrado.
Y en la gran confusión de idiomas múltiples
prevalecen las quejas por el trato.

Existen unas reglas muy concretas.
Son, como es natural, contradictorias
y uno ignora si acata o si transgredí.

Los grados superiores a su vez
están subordinados a inferiores.
Lo seguro es más bien lo transitorio.
No obstante hay buenos ratos, como aquellos
que enlazan a mujeres con los hombres.

O se autoriza a andar por los pasillos
y cambiar a otra celda o galería.
Resulta muy sencillo y complicado.

Porque hay turnos y horarios para todo.
Y es preciso cumplir el Reglamento,
pues sabemos que hay gente que a hurtadillas
nos vigila y comenta nuestros actos.
Se debe desconfiar de todo el mundo.

Y rechazar la idea de evasión.
Hasta este mismo instante es imposible.
Se saldría a otra celda parecida.

Incluso si uno muere, al pretender
buscar su libertad o estando enfermo,
lo entierran en un patio de esta cárcel.